Bodas2018: Víctor & Celia

/ septiembre 10, 2018

Abrimos el mes de septiembre con la boda de Víctor y Celia. Esta pareja unieron sus vidas ante sus familiares y amigos el día 1, en Villar de Peralonso (Salamanca). 

A penas una semana después de la preboda, nos volvemos a ver con Víctor y Celia, esta vez un poco más arreglados, la ocasión lo requiere. Aunque los nervios suelen hacer presa de los novios en los momentos previos a la ceremonia, esta vez fueron los padres los que presentaban esos síntomas del momento.

Víctor tranquilo, relajado y ya con esa seguridad ante la cámara. Cualquier día se nos vuelve modelo. Celia igual, con todo muy organizado y preparado, puede que haya sido la primera vez que nos haya sobrado tanto tiempo con una novia antes de la ceremonia. El día de la boda siempre suele ir acompañado de prisas.

Las horas previas nos dejan algunas anécdotas para contar. Cambio de zapatos a última hora, coches que pasan por el lavado automático minutos antes de la misa,…  Esas cosillas que luego uno repite en las siguientes bodas a las que va. La ceremonia, solemne y con un regalo en forma de voz que endulzó el enlace en la iglesia la Asunción de Villar de Peralonso. Las lágrimas también hicieron acto de presencia. La ausencia de aquellos que no estaban. Entonces aparecieron los nervios de última hora con ese lío entre libro, micrófono, texto, anillos,… Pero todo salió a pedir de boca.

El arroz se presumía un duro toro que lidiar. Los novios se nos quedaron algo agazapados en la puerta de la iglesia, aunque no pudieron lidiar con la lluvia de arroz. Lo que no pudieron hacer, es salir corriendo en un coche nupcial algo decorado para la ocasión. Totalmente forrado de plástico y globos, les esperaba a la salida de la iglesia.

El cóctel y la cena nos llevó a El Cuartón de Inés Luna. El día se dejó llevar entre brindis, risas y más fotos con los invitados. La sobremesa trajo muchas sorpresas en formas de canciones, regalos, vídeos y demás que hacen que esta boda sea inolvidable para toda esa gente que les quiere y les acompañó ese día. Incluso hay quien perdió su trabajo por poder asistir a la boda.
Os deseamos lo mejor en este nuevo camino que recorréis juntos. Sobretodo, os damos las gracias por confiar en nosotros para inmortalizar el día más importante de vuestras vidas, vuestra boda. Esperemos que os haya gustado el reportaje de fotos, los detalles, cada instante. Es un recuerdo para toda la vida. 

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